Linea de Vida Horizontal

Una línea de vida horizontal es un sistema anticaídas compuesto por un cable, cuerda o riel flexible o rígido, anclado entre dos o más puntos estructurales para proteger a los trabajadores en trabajos en altura y con riesgo de caída a distinto nivel, permitiendo su desplazamiento lateral seguro en superficies como techos, pasarelas o plataformas.

Componentes y características

Cable o Riel

El elemento principal de la línea de vida, puede ser flexible (de acero o sintético) o rígido.

Anclajes

Puntos fijos donde se fija el cable o riel, asegurando la línea horizontalmente a la estructura.

Absorbedor de energía

Un componente cuya función principal es disipar la energía cinética generada en caso de caída, nuestro sistema cuenta con un ARC (Absorbedor Reductor de Cargas) concebido para reducir las altas cargas que se transmiten a la línea.

Tensor

Permite mantener el sistema en la tensión adecuada para su correcto funcionamiento.

Carro de Movilidad

Proporcionan la libertad necesaria para que el trabajador se mueva lateralmente mientras permanece enganchado al sistema.

Líneas de vida flexibles (en 795-A)

Compuestas por cables, según la norma, de no menos de Ø 8 mm.

Líneas de vida rígidas (en 795-D)

Podrán estar compuestas tanto por rieles como por raíles rígidos.

Configuración

Es importante hacer los cálculos necesarios para configurar correctamente la línea de vida según la necesidad y características que presente el área donde se colocarán.

Deben tomarse en cuenta aspectos como:

Carga en los Extremos

La línea de vida flexible traslada multiplicada a los extremos y las curvas, la carga que se produce en el punto de dónde se genera la caída.

Esta carga además se verá aumentada en los casos en los que los sistemas se pretensen a mayor par con lo que, en muchos casos, habrá que instalar sistemas de absorción que reduzcan las cargas.

Distancia Libre de Caída

Además de la mencionada carga, en el momento de la caída el cable generará una flecha. Esta flecha se verá condicionada por el número de usuarios anclados a la línea de vida y por el factor de caída en el que se haya instalado la línea.

En la determinación de la altura libre también hay que tener en cuenta el despliegue de los EPIs que se utilicen con la línea: absorbedor de energía o anticaídas retráctil.

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